La inocencia y el miedo se unen en esta maravillosa novela que plasma los horrores del golpe militar de 1973 en Chile
Psicoanalista y escritora cubana. Nació en la Habana, pero se mudo a Chile en 1970, del cual tuvo que exiliarse en México tras el golpe de estado de 1973. Autora de diversos libros entre los cuales están El Paraíso de las moscas (2010), Tal vez vuelvan los pájaros (2014) y Escucha las sombras bajo el palmar (2015). Actualmente trabaja en un consultorio privado con niños, adolescentes y adultos; sin dejar a un lado la escritura. Su más reciente novela se titula Cuando llegues al otro lado.
Mar vive entre palabras inventadas y travesuras, como cualquier otra niña de 8 años, hasta que un día todo se torna negro: su padre se va, con la promesa de regresar. Y con eso el exilio de mar da inicio, en donde se vera obligada a dejar su vida actual. Acompañada de su madre y sus dos hermanos, cruzará las peligrosas y transitadas calles de Santiago, con el propósito de llegar a México y rehacer su vida. La incertidumbre y el peligro constante no la hará olvidar la promesa que le hizo su papá.
Tal vez vuelvan los pájaros me llegó como una recomendación a mi cuenta de Instagram, en donde se me prometía que lloraría incesantemente.
Tengo que informarles, que así fue.
Esta novela es histórica, ya que retrata los daños sufridos por el golpe militar de 1973 en Chile, así como la dictadura de ese entonces. Al aportar hechos reales a una historia ficticia, hace que impacte más y te abra los ojos acerca de la situación que viven muchas familias y su únicas alternativas ante tanto peligro e incertidumbre.
Antes de comenzar la lectura decidí que iba a investigar un poco acerca de este acontecimiento, donde mi querida Wikipedia ayudó bastante a que entendiera los hechos y consecuencias. Una vez investigado, me adentré en las páginas de este libro que cuenta con una portada magnífica.
Toda la historia está narrada por la misma Mar, contándonos sus aventuras, sus travesuras y su amor por sus padres y hermanos. Poco a poco nos vamos encariñando con este alegre e inocente personaje, que con palabras inventadas y una imaginación envidiable va aprendiendo del mundo y sus caprichos. Desde el primer capítulo aprendemos que el golpe de estado comenzó, pero al ser una niña no comprende que es lo que sucede y qué consecuencias le esperan por ello.
Considero que ese factor le da vida a la novela y plasma de manera perfecta la inocencia e ignorancia que un infante tiene ante sus alrededores, lo cual le da ese toque emotivo. Osorio le da al clavo con una fantástica narrativa que te lleva de regreso en el tiempo, además de hacerte sentir que estás en Chile, sufriendo de los mismos miedos que las personas afectadas en ese año.
El desenlace, en mi opinión, es demasiado emotivo, desgarrador y conmovedor. Las lágrimas no paraban de salir en las últimas páginas, lo cual destaco, ya que la autora supo usar las palabras adecuadas para que uno como lector se sintiera identificado con los personajes, sin dejar a aun lado la gran empatía que sientes hacia ellos.
Me encantaría platicarles el porqué del título de esta historia:
Jorge Semprún fue un sobreviviente de la segunda guerra mundial, el cuál después de haber peleado junto con la resistencia, fue llevado al campo de concentración de Buchenwald. Este hecho definió su experiencia literaria.
El olor de los hornos crematorios expedía un olor nauseabundo, el cual no solo causaba incomodidad a los habitantes del campo de concentración, si no a las aves que solían volar en esas zonas, las cuales desaparecieron durante esa época.
En el momento que se libera el campo, Semprún dice: "El crematorio se cerró ayer. Nunca más habrá humo en el paisaje ¡Tal vez vuelvan los pájaros!", indicando que el terror terminó.
Me fascinó la inclusión de esta frase por parte de Mariana Osorio, ya que refleja la esperanza y fe que queda en las personas aun cuando todo se vuelve negro, pero muy negro.
Una novela que te dará vueltas en un mar de inocencia y en vientos de incertidumbre. Ha entrado en mis libros favoritos del año y me encantaría que todo el mundo lo leyera. Está catalogado como juvenil, pero aun así lo recomiendo ampliamente a todas las edades, que podrán comprender el peligro y miedo que una persona con poder puede causar.
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